Desde que el Homo Sapiens construyó su primera cabaña, en la soleada estepa africana, el tema de la seguridad pasó a ser una de sus mayores preocupaciones, lo cual era comprensible, dada la cantidad de alimañas y fieras salvajes que rondaban por allí. Unos cuantos milenios después, esta preocupación sigue siendo la misma, ya que aunque nuestras cabañas y posesiones se han sofisticado un poco, las alimañas fieras también.
Cuando uno piensa en innovación, se tiene tendencia a pensar que sólo es posible en sectores punteros, de esos que están cercanos a la frontera tecnológica, y resulta sorprendente que todavía haya margen de mejora en algo tan trillado como el campo de la seguridad física. Parece improbable que candados, cadenas y cerrojos puedan todavía hoy aportar algo nuevo. Pues bien, lo que este video demuestra es que esto no es cierto, que todavía existen posibilidades de cuestionar, replantear y mejorar los sistemas de seguridad existentes en el mercado.
Aunque el video es un poco largo (5 minutos) lo cierto es que resulta hipnótico ver como el Forever Lock aporta una gran novedad: El bombín de llaves rotatorio, que queda oculto al intentar manipularlo para abrirlo, con lo que se elimina la posibilidad de introducir ganzúas y similares. Ocurrente, práctico y efectivo a la hora de disuadir a los amigos de lo ajeno.
He intentado localizar el nombre del fabricante, para profundizar en el producto, pero sin éxito. Por lo visto, este producto se distribuye sólo a grandes clientes y no está disponible (todavía) para el mass market.